En un terreno que ocuparía la mitad de una ciudad pequeña, Volvo Cars estableció su primera planta americana en el estado de Carolina del Sur.
Charleston, Carolina del Sur – Esta ciudad de la región sureña de Estados Unidos acaba de convertirse en uno de los ejes globales de manufactura de Volvo. En días recientes inauguró allí una gigantesca fábrica que producirá automóviles tanto para el mercado estadounidense como para exportación a todas partes del mundo.
En un terreno de 1,647 cuerdas, la fábrica de 2.3 millones de pies cuadrados tiene la capacidad de producir 150,000 unidades anuales. Recién abierta, ya emplea a mil personas, pero una vez comience a operar a toda marcha, el total de empleados subirá a 4,000. El costo total de construcción fue de $1,100 millones. En ella se hacen todas las funciones principales en la producción de un automóvil: estampado, pintura, ensamblaje y finalmente pruebas de control de calidad. Aquí puedes ver un vídeo.
Esta nueva fábrica establece a Volvo Cars como un fabricante de automóviles genuinamente global con centros de producción en las tres principales regiones de ventas: Asia, Europa y ahora, las Américas. Las plantas principales de la automotriz están en Suecia, Bélgica, China y ahora Estados Unidos, mientras que tiene fábricas de motores en Suecia y China, más ensambladoras en India y Malasia.
No obstante, Volvo Trucks, que opera como una compañía aparte, lleva décadas fabricando en Estados Unidos. Allá tiene tres plantas en Virginia, Maryland y Carolina del Norte. De hecho, Volvo Trucks, que es la segunda manufacturera más grande del mundo de camiones heavy duty, es dueña de los emblemáticos camiones americanos Mack.
Igualmente de global fue la inauguración de la fábrica. Periodistas de todas partes del mundo viajamos hasta Charleston por vía de Atlanta, no solo para ver el interior de la fábrica, sino también para presenciar el debut mundial del primer carro que será producido allí: el nuevo modelo de tercera generación del Volvo S60.
El S60 se convierte así en el primer modelo en la historia de Volvo Cars en ser producido en Estados Unidos. En el 2021 se le unirá un segundo modelo y es la próxima generación de la XC90.
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